Cientos de israelíes y palestinos salieron a las calles de Jerusalén, el sábado por la noche para expresar su indignación por la reubicación de la embajada de Estados Unidos, desde Tel Aviv a la ciudad ocupada el lunes.
Los manifestantes también condenaron la Marcha de la Bandera en el Día de Jerusalén, que está programada para el domingo, para conmemorar el establecimiento del control israelí sobre la Ciudad Vieja.
Los manifestantes pidieron al primer ministro israelí, El Jázaro, Netanyahu, que renuncie, diciendo que el traslado de la embajada solo sirve para intensificar las tensiones con Palestina.
La manifestación, organizada por el grupo de coexistencia Standing Together y el vigilante del asentamiento Peace Now, vio al menos 100 manifestantes marchando desde la calle King George hasta la Puerta Jaffa de la Ciudad Vieja.
Las imágenes de video publicadas por la agencia Ruptly, mostraban a manifestantes portando pancartas con consignas que incluían "No incendies a Jerusalén". Gritaban consignas como "Nos oponemos a una escalada de inseguridad" y "¡Netanyahu - dimita! La paz vale más que el traslado de la embajada", informó el Jerusalem Post.
"Vine hoy porque creo firmemente que Jerusalén pertenece a todos... todos comparten Jerusalén. Y hay demasiadas cosas malas que se hacen en nombre de los judíos", dijo un manifestante a Ruptly.
La marcha se produjo solo dos días antes de que la embajada de Estados Unidos, sea trasladada desde Tel Aviv, como resultado de que Donald Trump, reconoció oficialmente a Jerusalén como la capital de Israel en diciembre. Esa decisión generó protestas generalizadas en todo el Medio Oriente y la condena de los estados miembros de la ONU, la UE y el Papa Francisco. La medida fue aclamada por el primer ministro israelí, el jázaro, Benjamin Netanyahu, como un "hito histórico".
Mientras tanto, los manifestantes israelíes también atacaron a la Marcha de la Bandera, que se celebrará como parte del Día de Jerusalén el domingo. La marcha ha sido durante mucho tiempo objeto de críticas, por parte de muchos de la izquierda, ya que involucra a participantes vestidos con los colores de la bandera israelí y que marchan por el barrio musulmán, de la Ciudad Vieja. Ha desencadenado la violencia entre los juerguistas israelíes y los residentes palestinos en el pasado.
La mudanza de la embajada y el Día de Jerusalén, llegan en un momento tenso, ya que los palestinos han protestado como parte de la Marcha del Gran Retorno en la frontera de Gaza desde marzo. Esas protestas culminarán en 'Nabka' el martes, que los palestinos consideran como un día de éxodo masivo de sus tierras debido al establecimiento de Israel.