Parece que los Cascos Blancos se están preparando para otro ataque químico con bandera falsa en Siria
El grupo vinculado a Al-Qaeda trajo productos químicos, equipos de protección y cámaras a un área controlada por los rebeldes en Siria, dijeron los habitantes de Idlib al Centro de Reconciliación de Rusia.
El general de división Aleksey Tsygankovthe, jefe del Centro de Reconciliación de Rusia, dijo a periodistas que seis vehículos con los emblemas de los Cascos Blancos llegaron a la capital de la provincia durante el fin de semana.
Los informes siguen a una advertencia del Ministerio de Defensa ruso que dice que tenían información creíble de que las fuerzas especiales estadounidenses estaban ayudando a los militantes a organizar un "ataque con armas químicas" para provocar ataques aéreos occidentales contra el gobierno sirio.
Uno de los camiones estaba cargado con misiles y botes que contenían sustancias desconocidas, así como equipo de protección y filmación. Los residentes locales informaron haber visto a cuatro personas, usando equipo de protección contra materiales peligrosos, y un polvo desconocido. Según los informes, el convoy partió para el pequeño pueblo de Maarat al-Numaan, al sur de la ciudad de Idlib.
Los cascos Blancos se ha convertido en varias ocasiones en el primero en proporcionar imágenes de supuestos sitios de ataques químicos en Siria y las escenas posteriores, incluidos los incidentes en Khan Shaykhun y Douma. Sus fotos y videos sirvieron como prueba suficiente para que Estados Unidos y sus aliados realicen de inmediato ataques de "represalia" contra las fuerzas del gobierno sirio en abril de 2017 y en abril de 2018.
Los autodenominados voluntarios también han estado sumidos en la controversia por sus vínculos con los terroristas de al-Qaeda y otros grupos extremistas en Siria. El grupo opera exclusivamente en áreas controladas por militantes de Siria, y sus miembros han sido fotografiados y filmados repetidamente confraternizando con yihadistas.
A pesar de toda la controversia, el grupo es alabado como heroico por los principales medios de comunicación y recibe fondos de los gobiernos occidentales. Mientras Washington dejó de financiar brevemente al grupo, al parecer pronto se dio cuenta de su utilidad y entrego 7 millones de dólares para las "operaciones vitales y salvar vidas" de los llamados activistas sirios de Defensa Civil. Londres también prometió seguir financiando al grupo, mientras que la primera ministra británica Theresa May incluso se comprometió a aumentar sus fondos.